Se tratan de lavar las manos cual Poncio Pilatos.
Las presunciones de corrupción en la compra de Aviones Mirage, a Bélgica, genera montones de dudas, y ha desatado las mas bajas pasiones del oficialismo en sus intenciones por culpar a otros de la falta de fiscalización o por el suceso.
Lo cierto es que se habrían paga 15 millones de dólares den “comisiones” y que se acusa al General Vega de haber recibido 3 de esos millones en conjunto con miembros de su familia, la pregunta obvia es ¿ Donde están los otros 12 y quien o quienes los recibieron?
A raíz de la Sesión especial del Senado fuimos testigos de la impúdica maniobra del oficialismo para convertir a Frei en una victima de la situación y de las malévolas acusaciones de Escalona contra el Presidente de la Corporación.
Lo cierto, es que de acuerdo al documento exhibido por Frei los contratos los firmó Aylwin, a unos días de dejar la Presidencia y que la implementación de esta adquisición la realizó el Gobierno que el encabezaba.
Todos se tratan de lavar las manos, como Pilatos, pero la realidad indica que ni pueden tener la conciencia ni las manos limpias, porque al menos han fungido de cómplices de los hechos al no investigarlos a fondo.
Ayer, cuándo se hablaba de la formación de una comisión investigadora de la Cámara Baja, aparecieron las voces oficialistas tratando de culpar a Pinochet y acusando que la oposición “se opuso” a la formación de las comisiones pedidas por ellos.
Una vez más la concertación trata de sacar las castañas con la mano del gato, pues a pesar de las denuncias del Senado Ávila nunca la concertación, ni el Gobierno, demostraron interés alguno por investigar este asunto.
Todas las irregulares deben ser aclaradas de forma exhaustiva, usando la expresión de Lagos “caiga quien caiga”, porque en caso contrario se está avalando la corruptela y demostrando una colaboración peligrosa con la falta de honestidad.
Nosotros, sin tener los antecedentes, creemos que las empresas que corrompen, en este caso los vendedores, incentivan para que se les haga a ellos la adquisición a aquellos que deciden la firma de los contratos y a quienes autorizan los pagos.
De acuerdo a nuestra visión, Aylwin, Frei, el Ministro de defensa, el Subsecretario de Aviación y el Ministro de Hacienda deben una explicación plausible al país, además por cierto de enfrentar las responsabilidades políticas y legales del caso.
La corrupción debe ser desterrada de nuestro país, pues se está convirtiendo en una lacra que desangra a nuestro pueblo, sobrecargado de impuestos, y pone en serio riesgo la credibilidad y desarrollo del país.
