Demagogia una claro indicio corruptorLa corrupción, esa infección social fatal, tiene varias facetas, una de las cuales, sumamente importante por cierto, es la económica, con la falta de honestidad en las actividades publicas o privadas.
Una faceta casi desconocida es la de no respetar las Leyes y los reglamentos, que sin duda demuestra una absoluta falta de compromiso con el contrato social que da origen a nuestra sociedad.
Quizás la más grave, porque desata todas las otras, es la demagogia y el populismo, porque dan un viso de normalidad al engaño, la mentira y a la falsificación de las situaciones.
Hemos sido engañados por cuatro gobiernos que nos lo han prometido todo y no han cumplido nada, esa es la graficación más clara del significado de la demagogia, el ofrecimiento mentiroso.
En los próximos tiempos tendremos procesos electorales destinados a renovar la mitad del Senado, la Cámara de Diputados completa, Alcaldes y Concejales, además de Presidente de la República.
No nos dejemos engañar esta vez, hagamos lo razonable, cambiemos a los equipos que han demostrado una singular falta de honestidad, una impactante falta de capacidades y ningún respeto por la palabra empeñada.
Entre “malos negocios”, “jarrones perdidos” o simple rapiña la coalición oficialista le ha costado al país una inconmensurable fortuna y ha significado para los ciudadanos apreturas injustas.
Se nos amenaza con que un giro a la derecha puede ser desastroso, pero, aclaremos la derecha conservadora se encuentra hoy en la izquierda y la derecha económica nunca ha dejado de estar al alero del Gobierno de turno.
Hay que tener claro que podemos diferir en muchas cosas, tener ideas diferentes en casi todo, pero, para que a todos los chilenos nos vaya bien necesitamos llevar al poder a gente que se la pueda.
Debemos tener presente que votar por la concertación, en cualquiera de las elecciones, implica darle un voto de confianza, es decir, convertirse en cómplices de todos los latrocinios que han cometido en el país.
